Brighten up
Escribiendo como candidata para la presidencia de StuCo, sería tan fácil criticar a aquéllos que tienen el puesto ahorita. Pero eso implicaría juzgar públicamente a una de mis mejores amigas. Además, estaría echándole a un trabajo que jamás he hecho yo misma, y cabe mencionar, que es algo que jamás había querido tratar. Pero mi voluntad cambió hace unos meses.
Tal vez no muchos de ustedes se acuerden, pero en Halloween la planilla Gris había anunciado que la persona con el mejor disfraz se podría estacionar en VIP parking. Sonaba tan bueno el premio que me tragué la pena y me paré en frente de todos ustedes con una cartulina colgada del cuello y mi pelo escondido debajo de un sombrero mientras posaba como la famosa pared de nuestro querido Trump. Cinco meses después de haber ganado, sigo esperando recibir mi premio.
Pude haberlo olvidado, pude haberlo criticado, pero todos sabemos que eso no llega a nada. En vez, quiero dar las gracias, gracias a Grey por darme aún otra razón para inspirarme a correr. Tomemos las experiencias recientes como la oportunidad para cambiar.
Los estudiantes nos hemos vuelto expertos en los efectos que tienen las políticas implementadas por la administración del colegio. Tanta sabiduría y de muy poco uso. Ms. LaMadrid, Dr. Adams, los maestros, necesitan nuestra voz también. Ese es el trabajo de StuCo: representar los intereses de los alumnos para crear cambios que realmente importan.
Tanta comida gratis y decoraciones durante ´running week´ nos ha dejado demasiado ciegos para alcanzar a ver el potencial del consejo estudiantil. Todavía estamos a tiempo para cambiar. Para que se convierta en un consejo que sí cumple, un consejo que sí impone, un consejo que sí mejore, un consejo que sí importe.
La luz ya está puesta, tú decides si prenderla.
-Fosfo